El Máster en RSC (@Master_RSC) de la Universidad de Murcia alcanza ya su décima edición, y su período de matrícula está abierto hasta el próximo 14 de octubre de 2022. El enlace de inscripción está disponible en: https://casiopea.um.es/
El pasado año, uno de sus alumnas fue la periodista Helena Rodríguez (@helenart91), directora del periódico digital ‘Murcia Noticias’. Además de su dirección desde septiembre de 2021, cuenta con experiencia en comunicación corporativa en el Ayuntamiento de Murcia (2017-2021). En el día a día, se encarga de la dirección, coordinación y diseño de estrategia de este diario digital, así como de la gestión de los equipos de trabajo, la redacción de piezas informativas y de ‘community manager’.
Helena Rodríguez (https://es.linkedin.com/in/
Su acercamiento a la RSC viene de lejos, pero se lanzó a realizar este máster gracias a la recomendación referente en la integración de la RSC en el mundo de los RRHH de la empresa como Luis Pérez Armenteros (@Armenteros_Luis). “Esta formación de postgrado reunía todo lo que necesitaba para esa nueva etapa profesional: seriedad y rigor, excelentes docentes, clases presenciales y experiencias reales de empresas”, argumenta.
-Lo primero, ¿qué es para ti la RSC? ¿Y la sostenibilidad?
Sin duda, para mi la Responsabilidad Social Corporativa es compromiso. Compromiso con nuestra sociedad y con nuestro planeta. Soy una gran defensora de que el mundo se cambia cambiando primero ‘tu mundo’, tus hábitos, tus rutinas... los pequeños gestos tienen un poder enorme para cambiar conciencias. Y cambiando conciencias, se podrán tomar decisiones más responsables.
La sostenibilidad, esa palabra tan de moda para algunas empresas y marcas, no es otra cosa que garantizar el futuro. Si no se es sostenible, a nivel financiero, ambiental... no se avanzará.
No solo tenemos que avanzar a pasos agigantados para frenar y paliar esta crisis climática que muchos pretenden obviar, sino que debemos avanzar de forma colectiva y global en la lucha de Derechos Humanos, donde por desgracia, en algunas partes del mundo aún no se garantizan.
-¿Por qué elegiste cursar el Máster de RSC que se imparte en la Universidad de Murcia?
Intento tomar buenas decisiones, y sin duda esta es una de las mejores que he podido tomar a nivel profesional. Buscaba ampliar mis conocimientos y me interesada el mundo de la RSC, por eso, a la hora de lanzarme a buscar entidades que impartieran una formación de este tipo, no dudé en acudir a la universidad de referencia de la Región de Murcia.
Para mi, tras el Covid-19, era vital encontrar una formación con las clases presenciales, para así volver a las aulas y conocer gente que pueda compartir sus conocimientos y aportarme valores. Por eso la Universidad de Murcia reunía todo lo que necesitaba para esa nueva etapa profesional: seriedad y rigor, excelentes docentes, clases presenciales, experiencias reales de empresas...
-¿Quién te lo recomendó?
Al iniciar mi ‘investigación’ sobre donde formarme acudí a varias personas cercanas a este maravilloso mundo de la RSC, por eso acudí a Luis Pérez Armenteros -en aquel momento Project Manager Communication & Sustainability de Hero España- un ‘mentor’ que me animó a tomar esta decisión.
-¿Cuál es la gran enseñanza que te llevas del Máster en RSC? ¿Qué ponentes destacarías?
Me llevo muchas lecciones, pero sin duda la más importante para mi es la siguiente: toda empresa, institución y entidad pueden diseñar y ejecutar su estrategia de Responsabilidad Corporativa, independientemente de su tamaño, de su presupuesto y de su ubicación.
Respecto a la segunda pregunta, no podría escoger al ponente o profesor que más me gustó, pero sí me gustaría destacar a Longinos Marín por su cercanía y por ser el primer contacto de la RSC, por otra parte a Lucio Fernández, a nuestra madrina de promoción Ana Jiménez Alfaro y a mi tutora del trabajo final Mariola Palazón. Gracias a todos por su paciencia y profesionalidad para dar esas fantásticas lecciones un viernes hasta las 21h. Y por supuesto a Juan José Almagro, repleto de sabiduría que ‘lanza’ unas reflexiones que logran mover el mundo.
Respecto a las empresas que compartieron con nosotros su experiencia, sin duda me marcó Auxiliar Conservera y Hefame.
-¿Cuáles son a tu juicio las principales ventajas y beneficios para las organizaciones de apostar por la RSC?
A nivel empresarial, sin duda la rentabilidad que se logra a largo plazo y la mejora de la reputación que adquiere la marca, máxime cuando se piensa en el comprador del futuro y en las nuevas generaciones que llegan mucho más comprometidas.
Si se integra bien en la entidad, la RSC puede suponer un revulsivo para la empresa, no solo porque se logra rentabilidad, no solo porque se logre una mejor reputación o mejora tu marca, sino porque además todos tus grupos de interés comprenderán mejor tus valores y tu misión. A la larga, eso supone mejorar la calidad de vida de tus empleados, fomentar el talento, generar empleo, cuidar el medio ambiente... y así una larga lista de ventajas.
-¿Qué casos de éxito en la implantación de la RSC en las empresas murcianas te ha impactado o te ha llamado la atención durante el máster? Y, ¿en cuál o cuáles te gustaría poder trabajar o colaborar en el futuro?
Como he comentado anteriormente, me entusiasmó la presentación de Auxiliar Conservera, también Grupo Hefame quien nos contó su experiencia durante la pandemia. También Linasa, Mercadona y Hero. Muchos referentes tenemos en la Región de Murcia en el mundo de la RSC.
-En tu opinión, ¿cuáles son los principales errores que se están cometiendo en torno a la RSC?
El gran error es ver la RSC de forma frívola y superflua. De ahí que nazcan términos como el greenwashing o el pinkwashing. Si pretendes engañar, no vas por el buen camino, ni como empresa, ni como persona.
Si desconoces la RSC, creerás que es plantar unos árboles o hacer donaciones en Navidad, y la Responsabilidad Social va mucho más allá de estas acciones. Es una estrategia, la columna vertebral de una empresa o institución para convertirse en una entidad comprometida y responsable.
-Sobre la Agenda 2030 de Naciones Unidas y los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), más allá de los gobiernos ¿hasta qué punto las organizaciones o las empresas son clave para impulsar un mundo mejor con esta hoja de ruta?
Las empresas son uno de los motores económicos más importantes de un país o región, deben liderar. Por eso son clave para cambiar el mundo Al aplicar políticas que los trabajadores, clientes, usuarios y otros grupos de interés puedan llevar a cabo también fuera de su horario laboral, están ayudando a cambiar hábitos, a incorporar pequeñas mejoras que puedan dar un respiro al medio ambiente o a ser más conscientes de la necesidad de luchar por derechos básicos.
De 24 horas que tiene el día, ocho las pasamos trabajando, y alguna que otra hora más la pasamos en nuestra empresa. Esto quiere decir, que la mitad de nuestro día estamos allí, lo que nos da como resultado muchas horas para cambiar las cosas.
Por ejemplo, si hay papeleras de reciclaje en la empresa, acciones de voluntariado, no hay plástico en los puestos de trabajo, se fomenta el ahorro energético, el trabajador será más consciente y se dará cuenta de estos pequeños gestos para poder incorporarlos a su día a día. La suma de pequeñas acciones es fundamental para cambiar el futuro.
-En la empresa para la que trabajas actualmente, ¿cómo fomentáis en la organización la comunicación y diálogos con los grupos de interés?
Desde Murcia Noticias, al ser un medio de comunicación, somos conscientes de que la comunicación es clave para comprendernos. Las redes sociales son una gran ventaja para nuestro periódico digital ya que nos permite hablar directamente con el lector, respecto a la plantilla tenemos una política de comunicación interna por la que hay disponible una serie de acciones que van desde unos ‘cafés responsables’ hasta el clásico buzón de sugerencias.
- ¿Y cuáles son las principales buenas prácticas que destacarías?
La transparencia, la responsabilidad y el honor a la verdad debe ser el día a día de un medio de comunicación, y nosotros le sumamos una ‘pata’ más: la promoción del talento.
-¿Cómo te defines profesional y personalmente?
Me considero una persona comprometida, responsable e implicada con cada proyecto en el que me embarco, reconozco que soy muy corporativa allá donde me encuentre, porque escojo empresas e instituciones con las que comparto valores.
Gracias a mi profesión, he logrado trabajar mucho mi creatividad, siendo esto uno de mis puntos fuertes a nivel laboral, por otra parte, sin duda donde considero que más destaco es resolviendo problemas y gestionando proyectos. Personalmente, me considero una persona honesta, empática y leal, quizás unos valores que pasan desapercibidos hoy en día, pero que para mí, marcan la diferencia.
-¿Cómo fomentar una educación que tenga en cuenta no sólo el beneficio económico, sino también la adopción de los criterios ASG -Ambientales, Sociales y de Gobernanza-? ¿Quién o quiénes deben liderar este cambio?
Sin duda, el cambio nace de la educación. Creo que en este mundo de la RSC aún falta divulgar, hasta que el mensaje ‘cale’ en la sociedad, tanto en la generación de mi abuela como en la de los niños que vemos en los parques jugando.
Las instituciones tienen aquí un papel clave, no solo siendo ellos referentes en Responsabilidad Social, mediante distintos mecanismos, implantando una estrategia, sino también a nivel de comunicación y de educación. Pero no solo debemos dejar el papel de liderazgo a las instituciones o a las empresas y centros educativos, sino también es cosa nuestra. Una conversación, todo lo puede cambiar.
-Por último, te pedimos que compartas con nosotros una frase, un libro y una canción para este verano.
Canciones, películas, libros,... El verano es una época maravillosa para cambiar de actividad, consumir cultura, estar en contacto con la naturaleza y pensar. Y aquí os lanzo un libro que me emociona cada vez que lo leo: “En el mar hay cocodrilos’, de Fabio Geda.
Hay una frase que me ayuda mucho a tomar decisiones, tanto a nivel personal como profesional y que me invita mucho a reflexionar: “Si te quedas con lo que te apetece, no lograrás lo que te mereces”.
En el fondo, sabemos lo que nos merecemos y lo que no, por eso os animo a trabajar, a luchar y a esforzarnos por lo que merecemos. Si no se siembra, no se recoge.
