viernes. 29.03.2024

España y Países bajo fueron los únicos países de la OCDE que en enero tuvieron una inflación interanual de la energía negativa, lo que contrasta con la subida del 16,4% en el conjunto de los miembros.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) indicó este martes en un comunicado que los precios de la energía bajaron un 8,3% en España entre enero de 2022 y el mismo mes de 2023 y un 0,2% en Países Bajos.

En este último país, ese descenso contrasta con el incremento interanual del 30% que se había constatado en enero, lo que se explica por la introducción desde comienzos de año de un tope al precio de la energía.

En el caso de España, uno de los elementos que está detrás del descenso y que diferencia la evolución respecto a la de otros países de su entorno es la llamada excepción ibérica, que pone un tope al precio del gas que se utiliza para generar electricidad.

España ya había sido en todo el año 2022 el único de los 38 miembros de la organización con una inflación energética negativa (del 6,9%), frente a la subida del 18,2% de media en la OCDE.

En cuanto a la inflación general, en enero se situó en la OCDE en el 9,2%, dos décimas menos que en diciembre, y eso por la ralentización de los precios de la energía.

En el primer mes del año, hubo cuatro países que tuvieron una inflación inferior a la de España, que fue del 5,9%: Suiza (3,3%), Japón (4,3%), Corea del Sur (5,2%) e Israel (5,4%).

Ningún país europeo estaba en esa lista. En la zona euro, la inflación se quedó en el 8,7%, cinco décimas menos que en diciembre, y en la Unión Europea en el 10%, cuatro décimas menos.

Hubo cuatro miembros de la OCDE que en enero superaron el umbral del 20% de inflación: Hungría (25,7%), Letonia (21,5%), Lituania (20%) y, sobre todo Turquía (57,7%).

España, uno de los 2 países de la OCDE que presenta una inflación energética negativa