La financiación concedida por las entidades financieras a las familias residentes en España se redujo en julio en un 1,1% con respecto al mes anterior, lo que equivale a casi 8.000 millones de euros, con lo que el saldo vivo quedó en 705.122 millones.
Según los datos actualizados este jueves por el Banco de España, en comparación interanual, el crédito creció en casi 4.500 millones, un 0,63%, ya que a cierre de julio de 2021 la cantidad total prestada a los hogares se situaba en 700.668 millones.
En esta cartera se incluye el crédito destinado a vivienda, que se concede sobre todo a través de hipotecas, y que se situó en 519.099 millones de euros, un 0,2% más que un mes antes o 1.225 millones más.
Algunos expertos consultados atribuyen este incremento, que se produce después de tres meses de estancamiento, a una posible aceleración de las decisiones de compra de vivienda ante las subidas de tipos de interés que ya se han convertido en una realidad en la zona del euro, lo que encarece estos préstamos.
El crédito destinado al consumo, por su parte, se mantuvo estable en comparación con el mes anterior, en 93.786 millones, y se redujo frente a julio del año pasado, cuando el saldo vivo de esta categoría era de 94.027 millones.
Asimismo, la financiación a empresas residentes en España creció ligeramente en julio tanto en comparación mensual (un 0,46%) como anual (un 0,7%) lo que significa que se elevó en unos 4.400 y 7.000 millones de euros, respectivamente.
