La Confederación Española del Comercio (CEC) ha indicado este viernes que no espera "descuentos importantes" en las rebajas de verano que ya comenzaron en junio debido a la elevada inflación y ha confirmado que sus efectos ya se reflejan "inevitablemente" en el precio final de los productos.
En este escenario inflacionista, con el último dato adelantado del IPC en el 10,2 %, la CEC hace hincapié en que este hecho "está afectando de manera importante" a la capacidad de compra de las familias y por tanto al consumo, por lo que no espera tampoco un incremento significativo de las ventas.
La CEC ha aprovechado el primero de julio, que hace años marcaba el inicio de la campaña de descuentos veraniegos en el comercio, para alertar sobre la pérdida de poder de convocatoria de las rebajas desde la liberalización de los periodos de descuentos en 2012.
Además, explica en una nota que los descuentos serán menores por los "altísimos sobrecostes" a los que hacen frente en los últimos meses las pymes y los autónomos del sector, "que están reduciendo unos ya de por sí reducidos márgenes", añade.
Otro de los factores que influirá negativamente sobre precios más bajos es, a juicio de la CEC, que los establecimientos dedicados al equipamiento personal (textil, calzado o complementos), que tradicionalmente hacen un mayor aprovechamiento de estas campañas, "han registrado una mejora de sus ventas en los últimos meses, por lo que cuentan con menos inventario al que dar salida con precios agresivos". El presidente de la CEC, Rafael Torres, apunta que las rebajas de verano "se mantienen por tradición".
Sin embargo, Torres cree que la desestacionalización de los descuentos, que se encadenan a lo largo de todos los meses del año con promociones o descuentos ocasionales, "han disipado su impacto más allá de la primera semana”.
Sobre la campaña de verano en general, al margen de las rebajas, la CEC se ha mostrado "moderadamente optimista" por las previsiones de ocupación en el sector turístico. En ese sentido destaca la patronal que "ya está teniendo su impacto" en el comercio de zonas como Baleares o Canarias, que asegura que están notando una reactivación de las ventas.
