viernes. 29.03.2024

La Asociación de Promotores Inmobiliarios de Madrid (Asprima) ve necesario aumentar la construcción de vivienda asequible hasta superar las 75.000 unidades al año y para lograrlo aboga por un Pacto Nacional de Vivienda a largo plazo.

El objetivo de esta estrategia es posibilitar el acceso a la vivienda de las familias de rentas medias, adelantar la edad de emancipación de los jóvenes e incrementar la tasa de natalidad, señala en un comunicado.

MEDIDAS QUE PROPONEN

La patronal madrileña señala el suelo como el principal cuello de botella. Por ello, aboga por un cambio en las Leyes del Suelo para que los tiempos de desarrollo no sean de 20 años y para evitar la judicialización del urbanismo. Además, pide flexibilizar los cambios de uso y desvincular el desarrollo de suelo de la palabra especulación.

Asimismo, ve necesario reducir la carga burocrática y, en el caso concreto de la vivienda protegida, actualizar los reglamentos de vivienda autonómicos, ya que se han quedado obsoletos, y actualizar los precios máximos de venta, que en la Comunidad de Madrid están congelados desde el 2008.

También demanda una rebaja de la fiscalidad dado que el 25% del precio de una vivienda social son tributos y recuperar los convenios con las entidades financieras mediante avales públicos para incrementar la financiación hipotecaria de los jóvenes y familias solventes que no tienen el ahorro suficiente.

En este contexto, alerta además del problema de la falta de mano de obra al que se enfrenta el sector.

FALTAN 120.000 VIVIENDAS

Según Asprima, sólo en 2022 se produjo un déficit de 120.000 viviendas, una falta de oferta que está haciendo que la vivienda nueva pierda peso en el conjunto de transacciones, que se encuentran actualmente en el 18%, mientras que entre 2007 y 2022 se situaba de media en el 50%.

También ha disminuido el peso de la vivienda asequible nueva frente a la libre y se encuentra por debajo del 10 % del total.

A partir de 2013, según los datos analizados por Asprima, se desplomó la producción de vivienda asequible. Así, la media entre 2014 y 2022 fue de 8.300 viviendas asequibles al año, cifras que contrastan con las cerca de 79.000 viviendas al año que se ponían a disposición de los jóvenes entre 1980 y 2010.

Por otro lado, el 46% de los jóvenes entre 25 y 34 años vive con sus padres, siendo España el país europeo que más ha empeorado esta ratio en los últimos 10 años con más de un millón de jóvenes con trabajo que no se han emancipado.

"La Administración no es consciente de esta dimensión cuando la única fórmula de solución que se propone es la construcción de vivienda pública. Aunque realmente llegase a construirse en su totalidad la cifra de vivienda pública comprometida no dejaría de ser una gota en el océano", denuncia. 

Los promotores reclaman la construcción de más de 75.000 viviendas asequibles al año