FUSIÓN

Competencia 'bendice' la fusión de CaixaBank y Bankia pero con matices

La CNMC concluye que la operación supone una amenaza en determinados ámbitos del mercado de banca minorista

La Comisión ha llegado a la conclusión de que la operación no supondrá una amenaza para la competencia en estos mercados.

La Comisión Nacional del Mercado de la Competencia (CNMC) ha autorizado la fusión de CaixaBank y Bankia con el compromiso de que el nuevo grupo actuará para evitar la exclusión financiera y el posible endurecimiento de comisiones y condiciones comerciales, según ha informado este martes.

 

El futuro banco será líder en España en los segmentos de banca minorista, pero la fusión afecta también a los mercados de emisión de tarjetas, datáfonos o TPV y cajeros, así como a la venta de seguros y la gestión de planes y fondos de pensiones.

 

Tras el análisis de todos estos mercados, la CNMC ha llegado a la conclusión de que la operación no supondrá una amenaza para la competencia en estos mercados, ya sea porque las cuotas resultantes "no son preocupantes" o porque existe la suficiente competencia.

 

Sin embargo, el análisis de la CNMC concluye que la operación supone una amenaza en determinados ámbitos del mercado de banca minorista, especialmente en lo que se refiere a presencia en pequeñas localidades y acuerdos para el uso de cajeros.

 

EXCLUSIÓN FINANCIERA Y USO DE CAJEROS. Competencia ha identificado 21 códigos postales en los que la nueva CaixaBank será el único banco presente y otros 65 en los que sólo tendrá como competencia a otra entidad, lo que supone una nula o reducida presión competitiva en estas zonas y le otorgará "un elevado poder de mercado que podría influir en su comportamiento". Tanto es así que la CNMC identifica un riesgo de exclusión financiera en determinados lugares si se cierran las oficinas y teme que pudiera producirse un empeoramiento en las condiciones comerciales para los actuales clientes de Bankia.

 

En cuanto a los cajeros automáticos, la CNMC cree que los clientes de ING, Sabadell y las entidades de la red Euro6000 con acuerdos para acceder a la red de Bankia podrían tener ahora que pagar una comisión más elevada si se rompen esos pactos.

 

Esta situación, advierte la CNMC, sería "especialmente perceptible" en los lugares en los que Bankia tiene una cuota de cajeros especialmente relevante.

 

COMPROMISOS ADOPTADOS. A la vista de los problemas de competencia identificados y para evitar el riesgo de exclusión financiera y el posible endurecimiento de comisiones y condiciones, CaixaBank se compromete a no abandonar ningún municipio en el que no haya otra entidad financiera. En los 21 códigos postales en los que CaixaBank es la única entidad, el grupo mantendrá las condiciones de los clientes de Bankia y en los otros 65 códigos postales con poca competencia no podrá ofrecer condiciones peores a las que aplica donde más competencia tiene.

 

Además, CaixaBank no cobrará en ninguno de los 86 códigos postales "problemáticos" comisiones a los clientes procedentes de Bankia por operaciones en ventanilla si antes las tenían gratis y tendrá que comunicar a los clientes de Bankia con una antelación mínima de 30 días los cambios en productos que puedan afectarles.

 

La CNMC pone a modo de ejemplo de este tipo de comunicaciones las nuevas comisiones aplicables como resultado de la modificación de un producto o servicio derivada de la fusión, los derechos de que dispone el cliente ante un cambio de condiciones o la libertad para cambiar de entidad bancaria.

 

En el caso de los cajeros, el compromiso de CaixaBank pasa por ofrecer a los clientes de las entidades que tenían acuerdos con Bankia seguir accediendo a los cajeros que eran de este banco, o en caso de que desaparezca al más cercano de CaixaBank, durante un período de 18 meses y en las mismas condiciones económicas.

 

En relación con las participaciones minoritarias comunes de CaixaBank y Bankia, el compromiso pasa por cumplir con las obligaciones estatutarias y pactos de socios en cuanto a la desinversión del porcentaje de participación del capital social que exceda del límite previsto como resultado de la operación.

 

La CNMC considera adecuados estos compromisos para solucionar los problemas de competencia que presentaba la operación, pero avisa de que vigilará que se cumplan por parte de CaixaBank, que deberá informarle en los plazos acordados para ello durante su vigencia.