CAMPAÑA

La Fundación La Caixa, con los imprescindibles de la investigación médica

Isidro Fainé, presidente de la Fundación, presenta la nueva campaña de comunicación de la entidad, que quiere reconocer la importancia de la investigación

 

Isidro Fainé, presidente de la Fundación Bancaria La Caixa, y Jaume Giró, director general de la Fundación Bancaria La Caixa, acompañados de los doctores María Blasco, Valentí Fuster, Maite Mendioroz, Eduard Gratacós, Bonaventura Clotet y Pedro Alonso, han presentado en CaixaForum Madrid la nueva campaña de publicidad de la Fundación Bancaria La Caixa, que gira en torno a una única palabra: Imprescindibles. Si el año pasado se centró en aquellas personas indispensables de las entidades sociales, este año se quiere dar voz a los referentes en el campo de la investigación de excelencia que trabajan para dar respuesta a los grandes retos de la humanidad en temas de salud, con el objetivo de combatir las enfermedades con mayor impacto en el mundo.

 

Todos ellos han explicado las grandes líneas de investigación en las que están trabajando en este momento, y han hecho especial hincapié en la importancia del mecenazgo científico para poder seguir investigando y encontrar las claves para resolver las enfermedades que más afectan al conjunto de la sociedad. Para un país, la inversión en ciencia es un factor que favorece el desarrollo de una economía basada en el conocimiento.

 

Con este planteamiento, los spots, un total de siete, recogen los testimonios de representantes de entidades que la Fundación Bancaria La Caixa impulsa en cuestiones de gran trascendencia, como crear fármacos contra el cáncer, promover la salud cardiovascular, descubrir nuevas vías para prevenir el alzhéimer, salvar la vida de millones de niños antes de nacer, conseguir una vacuna contra el sida o erradicar la malaria y otras enfermedades asociadas a la pobreza.

 

Con el impulso a los programas de investigación, la Fundación Bancaria La Caixa contribuye a ampliar las fronteras del conocimiento orientando su intervención hacia la búsqueda de soluciones a los grandes retos de la humanidad, muchos de ellos relacionados con la salud, y mejorar así la vida de millones de personas. Esta es una de las líneas de actuación estratégicas de la entidad.

 

"Para la Fundación Bancaria La Caixa, las campañas de publicidad son mucho más que una acción de difusión. Con ellas queremos sensibilizar y movilizar a la sociedad. En este caso, lo hacemos en favor de la trascendencia del papel que desempeña la investigación y de la importancia del mecenazgo en la lucha contra las enfermedades más extendidas. Reconocemos y apoyamos de manera muy decidida el imprescindible trabajo de nuestros científicos", explica el presidente de la Fundación Bancaria La Caixa, Isidro Fainé.

 

En la campaña —que arranca este sábado 8 de septiembre en prensa escrita,  televisión y radio (y que luego se difundirá en otros soportes como cines y medios digitales como las redes sociales)— han colaborado los doctores Josep Baselga, director médico del Hospital Memorial Sloan Kettering Cancer de Nueva York y presidente del Comité Científico Interno del Vall d’Hebron Instituto de Oncología; María Blasco, directora del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas; Valentí Fuster, director del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares y del Mount Sinai de Nueva York; Maite Mendioroz, directora del Laboratorio de Epigenética-Alzhéimer de Navarrabiomed; Eduard Gratacós, director del Centro de Medicina Fetal del Hospital Clínic-Sant Joan de Déu; Bonaventura Clotet, director del Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa, y Pedro Alonso, fundador de ISGlobal y director del Programa Mundial de Malaria de la OMS.

 

La colaboración con todas estas entidades permite a la Fundación Bancaria La Caixa desarrollar su papel como líder de las instituciones que impulsan la investigación del sector privado en España. El Plan Estratégico 2016-2019 intensifica este apoyo triplicando el presupuesto dedicado a la investigación hasta alcanzar los 90 millones de euros en 2019. Un esfuerzo que convierte a la Fundación en la segunda de Europa y la tercera del mundo en términos de filantropía.

 

En la campaña se recogen los testimonios de los líderes científicos y se explican las claves más importantes de su investigación.

  • Dr. Baselga: "Hoy en día, por primera vez, entendemos lo que es el cáncer".
  • Dra. Blasco: "Queremos acelerar el descubrimiento de nuevos fármacos contra el cáncer".
  • Dr. Fuster: "Hay dos claves para promover la salud cardiovascular: la ciencia y la educación".  
  • Dra. Mendioroz: "Solo tenemos una herramienta para ganar al alzhéimer: la investigación".
  • Dr. Gratacós: "La medicina y la cirugía fetal permiten salvar la vida de miles de niños antes de que nazcan".
  • Dr. Clotet: "La lucha contra el sida podría dar un paso de gigante en los próximos años".
  • Dr. Alonso: "La malaria acaba con la vida de casi medio millón de personas cada año".

 

Todos ellos coinciden en la importancia del mecenazgo científico para lograr que la ciencia avance y, al mismo tiempo, del desarrollo de una economía basada en el conocimiento y el progreso de las sociedades.

 

IMPRESCINDIBLES PARA LA SALUD Y LA CALIDAD DE VIDA DE MILLONNES DE PERSONAS. Esta campaña quiere rendir homenaje a los investigadores que dedican su talento y esfuerzo a encontrar soluciones y tratamientos para algunas de las enfermedades que afectan a más personas. Las cifras hablan por sí solas y explican por qué estos investigadores son imprescindibles:

 

El cáncer es una de las principales causas de morbilidad y mortalidad en todo el mundo. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2015 se registraron 8,8 millones de muertes relacionadas con esta enfermedad. Se prevé que el número aumente aproximadamente un 70 % en los próximos 20 años. Según la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), se estima que uno de cada dos hombres y una de cada tres mujeres sufrirá un cáncer a lo largo de su vida.

 

Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en el mundo. Según la OMS en 2015, más de 17 millones de personas murieron por causas relacionadas con enfermedades cardiovasculares. De ellas, 7,4 millones murieron por cardiopatías coronarias y 6,7 por accidentes cerebrovasculares.

 

En el mundo hay unos 47 millones de personas que sufren demencia, con 9,9 millones de casos nuevos cada año, lo que supone la séptima causa de muerte en el mundo, según la OMS. Cada tres segundos se diagnostica un nuevo caso. Si no se encuentra una cura efectiva, se prevé que en el año 2050 el número de casos se habrá triplicado y el alzhéimer se habrá convertido en una de las enfermedades más importantes del siglo xxi.

 

Los bebés que sufren problemas en el útero aumentan el riesgo de padecer discapacidad o problemas cardiovasculares o metabólicos de por vida. Según la OMS, se estima que cada año nacen en el mundo unos 15 millones de bebés antes de las 37 semanas de embarazo, lo que supone más de un 10 % de prematuros. En el año 2015, más de un millón de esos niños prematuros murieron por complicaciones en el parto. La prematuridad es la primera causa de mortalidad en los niños menores de cinco años.

 

En el caso del sida, en 2016 la OMS estimó que 1,8 millones de personas se infectaron con el VIH y que 1 millón de personas murieron por esta causa. Según el Instituto de Salud Carlos III, cada día hay 10 nuevos diagnósticos de VIH en España.

 

En cuanto a las enfermedades infecciosas, cada año se detectan 212 millones de casos de malaria en el mundo, la mayoría de ellos, en niños menores de 5 años residentes en África, según la OMS. Y cada año se descubren 10,4 millones de nuevos casos de tuberculosis que generan 1,8 millones de muertes; es la novena causa de mortalidad en el mundo.

 

Este homenaje a los centros de investigación a través de sus líderes quiere ser también un reconocimiento a los profesionales que de forma anónima dedican su día a día a trabajar para mejorar la vida de los demás, desde los investigadores junior que se integran en los grandes equipos hasta los estudiantes que reciben su primera oportunidad siendo becarios, sin olvidar la tarea indispensable de personas anónimas que participan voluntariamente en estudios de cohortes o ensayos clínicos para encontrar nuevas vías de curación de las enfermedades.