viernes. 29.03.2024

NaviLens, la app desarrollada por la tecnológica murciana Neosistec para servir de 'lazarillo' para las personas con discapacidad visual, sigue su imparable despliegue y ya traspasa las fronteras españolas. Entre los últimos hitos alcanzados por la compañía liderada por Javier Pita se encuentra su acuerdo con la multinacional de cereales para desayunos Kellog's,

 

La compañía ha lanzado un nuevo packaging para los Choco Krispies que comercializa en Inglaterra (allí denominados 'Choco Pops'), incluyendo por primera vez el código NaviLens, creando así un embalaje más inclusivo para las personas con discapacidad visual.

 

Gracias al código NaviLens en el propio embalaje, las personas ciegas y con baja visión pueden localizar sin ayuda el paquete en las estanterías del supermercado, así como el poder acceder a toda la información que contiene el mismo, como por ejemplo sus ingredientes, sus valores nutricionales, sus alérgenos, etc. de forma completamente independiente.

 

 

Se trata de un hito importantísimo para la compañía murciana, pues es la primera vez que NaviLens se incluye en un producto de consumo, pues hasta ahora se había usado principalmente como señalética para orientar a las personas con problemas de visión por el callejero de una ciudad, o por servicios de transporte, como aeropuertos o paradas de autobús.

 

Kellogg's ha contando con la participación de la RNIB, la asociación nacional de personas con discapacidad visual de Inglaterra, así como el asesoramiento por parte del colegio St Vincent's de Liverpool.

 

LOS AUTOBUSES DE NUEVA YORK. Tras lograr introducir por primera vez sus códigos en productos de consumo como los Choco Krispies, NaviLens cruzó el 'charco' y puso rumbo a la Gran Manzana, pues ha cerrado un importante acuerdo con la MTA (Autoridad Metropolitana del Transporte, por sus siglas en Inglés -Metropolitan Transportation Authority-) de Nueva York para instalar sus códigos policromáticos en las paradas de autobús de la capital neoyorkina.

 

En la primera fase, el código NaviLens se ha agregado a los postes de las paradas de autobús en la calle 23 de la ciudad de Nueva York. Gracias a las características del código de nueva generación, los usuarios pueden escanear el código desde unos 10 metros de distancia, sin tener que enfocarlo, resolviendo el problema de inexactitud del GPS y ayudando al usuario a localizar con extrema precisión la posición exacta de la parada de autobús. Y al mismo tiempo, simplifica la movilidad para todos los pasajeros con nuevas experiencias como la confirmación visual utilizando una realidad aumentada de vanguardia.

 

 

Estos revolucionarios códigos darán información adicional, determinando incluso si el autobús está lleno y ayudando incluso al usuario a dirigirse al vehículo cuando llegue a la parada.

 

LA AUDIOGUÍA GLOBAL DE CÓRDOBA. NaviLens ya es un éxito en España, pues son ya varias las ciudades, como Madrid, Barcelona o Zaragoza, que han puesto en marcha este sistema. En esta ocasión, ha sido Córdoba la que ha empezado a desarrollar este sistema inclusivo, anunciando que en una primera fase se instalarán los en más de 200 puntos del municipio.

 

 

Los primeros puntos en recibir sus códigos serán calles, monumentos, y paradas de autobús. El ayuntamiento de Córdoba quiere aprovechar las funcionalidades de NaviLens no solo para ayudar a las personas con problemas visuales, sino para añadir información útil para los turistas. Es decir, Córdoba quiere, además de ayudar a los invidentes, convertir NaviLens en su audioguía global. El edil nazarí de Inclusión y Movilidad, Bernardo Jordano, ha confirmado que “acabará implantándose en todas las instalaciones municipales, edificios públicos, deportivos, etc”

 

EVOLUCIÓN INCLUSIVA DEL CÓDIGO QR. NaviLens se inspira en el funcionamiento de los códigos QR, evolucionándolos hacia un sistema de códigos de color, que encierran información que puede ser captada con un teléfono móvil. El dispositivo, mediante mensajes de audio, informa al usuario de la información del código: distancia hasta un objeto, número del autobús o, ahora, información sobre productos como los cereales de desayuno o su contenido nutricional.

 

El móvil es capaz de percibir estos códigos, que se pueden fijar en cualquier lugar con una impresión o con un adhesivo, a más de 12 de metros de distancia, aunque la empresa de Pita ya está ensayando en el municipio de Murcia una nueva generación de códigos que pueden ser recibidos a 22 metros de distancia.

 

Se trata, pues, de un revolucionario avance tecnológico que convierte al mundo en un espacio más inclusivo y más igualitario. Todo ello con ADN 100% levantino, pues ha sido desarrollado íntegramente en la murciana Neosistec con la colaboración de la Universidad de Alicante.

La murciana Navilens sigue conquistando el mundo: los Choco Krispies, Nueva York y Córdoba