ACUERDO

Repsol se adentra en la producción de biometano con la adquisición del 40% de Genia Bioenergy

La operación incluye el desarrollo de 19 plantas de biometano, con una capacidad total de 1,5TWh al año, que generarán gas renovable mediante el aprovechamiento de residuos agrícolas y ganaderos en España y Portugal.
La entrada en el capital de la compañía especializada en biometano permitirá crear una plataforma de crecimiento en la industria emergente de gas renovable, considerado estratégico por la Unión Europea.

Repsol ha llegado un acuerdo para tomar una participación del 40% en la compañía Genia Bioenergy, con la que entra en el mercado del biometano, un gas renovable, ha informado este miércoles la petrolera.

El acuerdo entre Repsol y Genia Bioenergy incluye 19 de las plantas de biometano de esta compañía, que se encuentran en estado de desarrollo.

Además, tiene otros once proyectos en una fase temprana de desarrollo.

Repsol comprará la totalidad del gas producido por estos proyectos, que van a conformar una plataforma única para crear ecosistemas agroindustriales para impulsar las economías locales y ofrecer soluciones para valorizar y transformar residuos. Así, el biometano producido se utilizará tanto para el consumo interno de Repsol como para comercializarlo a clientes.

Genia Bioenergy integra toda la cadena de valor del biogás y biometano, incluyendo el desarrollo de tecnologías y soluciones, así como la ingeniería, construcción y operación técnica biológica de los proyectos.

La Unión Europea quiere multiplicar por ocho la producción de biometano en 2030 respecto a la que había en 2022, según recoge en su Plan RePower EU.

Por su parte, la Asociación Española del Gas (Sedigas) estima que el biometano puede llegar a representar casi la mitad del consumo de gas natural de España.

El biometano es una alternativa renovable al gas natural y se origina a partir de materia orgánica, como los residuos agrícolas y ganaderos.

Aparte de poder sustituir al gas convencional, el biometano se puede usar para producir combustibles renovables e hidrógeno verde, y fabricar productos químicos, reduciendo en esas actividades la emisión de gases de efecto invernadero (GEO).

En España y Portugal la industria del biometano es aún emergente, si bien contribuye a resolver el problema que representan los residuos orgánicos para las administraciones, unos residuos, que, si no se utilizaran, generarían emisiones a la atmósfera al degradarse en vertederos.