miércoles. 24.04.2024

La Comisión ha propuesto reformar la configuración del mercado de la electricidad de la UE para acelerar el aumento de las energías renovables y la eliminación progresiva del gas, hacer que las facturas de los consumidores dependan menos de la volatilidad de los precios de los combustibles fósiles, proteger mejor a los consumidores frente a futuras subidas drásticas de los precios y posibles manipulaciones de mercado, y lograr que la industria de la UE sea limpia y más competitiva. 

Tras más de veinte años con un mercado de la electricidad eficiente y bien integrado que ha permitido a los consumidores aprovechar los beneficios económicos de un mercado único de la energía, que ha garantizado la seguridad del suministro y ha estimulado el proceso de descarbonización, la crisis energética provocada por la invasión rusa de Ucrania ha acentuado la necesidad de adaptar rápidamente el mercado de la electricidad para apoyar mejor la transición ecológica y ofrecer un acceso generalizado a la electricidad no fósil, renovable y asequible, a los consumidores de energía, tanto hogares como empresas. 

La reforma propuesta prevé la revisión de varios actos legislativos de la UE, en particular el Reglamento sobre la electricidad, la Directiva sobre la electricidad y el Reglamento sobre la integridad y la transparencia del mercado mayorista de la energía (REMIT). En ella se introducen medidas que incentivan los contratos a largo plazo con producción de energía no fósil y se aportan al sistema más soluciones limpias y flexibles para competir con el gas, como la respuesta de la demanda y el almacenamiento. Esto reducirá el impacto de los combustibles fósiles en las facturas de electricidad de los consumidores y garantizará que en ellas se refleje un menor coste de las energías renovables. Además, la reforma propuesta impulsará la competencia abierta y leal en los mercados mayoristas europeos de la energía mediante el aumento de la transparencia y la integridad del mercado. 

La construcción de un sistema energético basado en las energías renovables será crucial no solo para reducir las facturas de los consumidores, sino también para garantizar a la UE un suministro energético sostenible e independiente, en consonancia con el Pacto Verde Europeo y el plan REPowerEU. 

Los precios elevados y volátiles, como los observados en 2022 provocados por la guerra energética de Rusia contra la UE, han supuesto una carga excesiva para los consumidores. Esta propuesta permitirá a los consumidores y a los proveedores beneficiarse de una mayor estabilidad de precios basada en tecnologías de energías renovables y no fósiles. Fundamentalmente, ofrecerá a los consumidores una amplia gama de contratos y una información más clara antes de firmarlos, para que tengan la opción de fijar precios seguros y a largo plazo, y eviten así los riesgos excesivos y la volatilidad. También se refuerza significativamente la protección de los consumidores vulnerables. En el marco de la reforma propuesta, los Estados miembros protegerán de la desconexión a los consumidores vulnerables con pagos atrasados. Asimismo, en caso de crisis, se permite a los Estados miembros hacer extensivos los precios al por menor regulados a los hogares y las pymes. 

Por otro lado, para mejorar la competitividad de la industria de la UE y reducir su exposición a la volatilidad de los precios, la Comisión propone facilitar el despliegue de contratos a largo plazo más estables, como los contratos de compraventa de energía (CCE), a través de los cuales las empresas establecen sus propios suministros directos de energía y, de este modo, pueden beneficiarse de precios más estables de la producción de energía renovable y no fósil. 

La Comisión propone la reforma del mercado de la electricidad de la UE