La Fundación Ingenio se sitúa como referente nacional en materia de responsabilidad social corporativa y buenas prácticas agrícolas, aprobando en su asamblea general de patronos un estricto código ético de obligado cumplimiento para las empresas que la integran y que se centra fundamentalmente en tres áreas: condiciones laborales, protección del medioambiente y calidad de procesos.
Entre otras cosas, el código ético de Fundación Ingenio recoge las condiciones generales para la contratación de mano de obra por parte de las empresas y cooperativas agrícolas que operan en el Campo de Cartagena, haciendo especial hincapié en el cumplimiento de la legislación laboral, los planes de igualdad y la participación activa de los trabajadores mediante delegados de personal y comités de empresa.
Asimismo, el código ético establece que las empresas y cooperativas integradas en Fundación Ingenio deberán someterse a una auditoría externa, realizada por la certificadora internacional Bureau Veritas, en la que se evaluarán los consumos sostenibles de agua y fertilizantes, así como las medidas de protección de la biodiversidad y de los suelos, con el fin de asegurar una producción agrícola sostenible y respetuosa con el medioambiente y, muy especialmente, con el ecosistema del Mar Menor.
Las empresas y cooperativas que superen con éxito la auditoría externa recibirán el Sello de Excelencia de Fundación Ingenio, un distintivo que pone en valor “las buenas prácticas que ya se vienen realizando por parte de muchos agricultores en el Campo de Cartagena”, afirma la directora de Fundación Ingenio, Natalia Corbalán.
