GASTRONOMÍA

Fash Food sienta a sus comensales a cenar en el césped del estadio Nueva Condomina

El menú fue creado y cocinado en exclusiva por el chef Juan Guillamón, del restaurante AlmaMater de Murcia

La segunda temporada del movimiento de cenas y experiencias efímeras Fash Food sienta a 34 comensales a comer en pleno centro del campo del estadio Nueva Condomina, sede del Real Murcia.

 

El menú fue creado y cocinado en exclusiva por el chef Juan Guillamón, del restaurante AlmaMater de Murcia, para Fash Food, solo para los afortunados comensales que consiguieron plaza en este evento. El maridaje también fue excepcional y con raíces murcianas, elaborado por el sumiller de AlmaMater Alberto Hernández, que combinó cada uno de los snacks, platos y postres con cervezas de Estrella de Levante y vinos de la D.O.P. Jumilla.

 

La cena se centró en el concepto ‘CYMMA’, representándose a través de una cena olímpica inspirada en la Grecia clásica, con esculturas, decoración y detalles cargados de simbolismo.

 

La velada dentro del estadio comenzó con un cóctel de aperitivo de Martini Fiero ofrecido por Campoluz en los vestuarios, decorados para la ocasión con bustos griegos, hojas y mezclas de tejidos en blanco, ambientando la localización que estuvo a su vez dirigida por el actual entrenador del Real Murcia, Adrián Hernández, continuando con la división de los comensales en dos equipos para crear una entrada triunfal al centro del campo de fútbol. En el propio campo les esperaba una mesa imperial con una decoración original, donde distintos tipos de mármol convivían con elementos creados en césped con diversas formas geométricas; una mesa singular que compartirían los 34 comensales de la experiencia y una cocina de Fornet donde el chef Juan Guillamón elaboró su menú creado en exclusiva para la iniciativa Fash Food e inspirado en el equipo Real Murcia, del que él es abonado.

 

El menú, planteado en 9 pases, brilló con magia pimentonera en los tres snacks: tartar de nísperos y foie gras a la sal, picotas con cremoso de comino, y nigiri ahumando de salmón a la llama. De los platos principales destacaron el ajoblanco, almendra tierna y melocotón; bonito confitado en escabeche de limón, ensalada de hinojo y algas; huevo poché, morcilla de verano y velouté de miso; Cherna con apionabo, verduras al vapor y sésamo negro, un clásico en la cocina de Guillamón; y cordero segureño a baja temperatura, cous cous de verduras y patata especiada. tudio de fotografía Barita.