miércoles. 24.04.2024

Marcos Sáez en Zukán, una empresa en la que disfrutar como un niño

Hoy en los mejores de la Región descubrimos a una empresa muy dulce. Podría decir que es mi entrevista más dulce de todas… Sobre las 9:06 horas de la mañana llego a sus oficinas, en la fábrica. Espero en la sala 4 y enseguida llega Marcos Sáez, CEO de Zukán, más cercano de lo que yo creía, ya que acepta el reto de esta entrevista con Carrillo Asesores a pecho descubierto. Nos saludamos guardando la distancia de seguridad y, con tono firme pero amable me explica más allá de mis preguntas lo imprescindible del azúcar, con toda su paciencia, he de advertir…

 

Empezamos con una pregunta fácil, ¿cuál es la esencia de la empresa?

Él no duda ni un momento, lo tiene claro: El alma de esta empresa es José Moreno, la propiedad. Sus valores, su cercanía, su afán por las personas, el reto de vencerse y superarse, ha marcado el crecimiento de la empresa. Y ha marcado en la forma en la que todos hemos construido Zukán”.

 

Sus palabras de seguridad y de admiración son sin duda lo que más despierta mi atención, hombre joven y cercano hablando con el talante y precisión de una persona que ha debido endulzar muchas situaciones difíciles para salir adelante. Resulta tener la pasión de una persona muy joven y al tiempo la entereza de una edad cercana a los cincuenta.

 

¿Cómo se crece en una empresa que dedica toda su actividad al azúcar, en una sociedad tan cambiante y que es siempre light?

Su respuesta clarísima y directa. Va sin rodeos ante la vida; será porque es de verdad una persona con resiliencia. Hacía tiempo que no veía a alguien así, tan abiertamente, me encanta ver que en Murcia hay empresas lideradas por personas tan fuertes. Es alentador. “La respuesta es: aportando valor a nuestros productos. La razón no es tanto si el azúcar es o no parte de las mal denominadas 'sustancias blancas' o 'venenos blancos’, sino todo lo contrario, a veces no somos conscientes de que todos los alimentos contienen azúcar, la mayoría de forma natural, y nosotros, ya desde el inicio con José Moreno, vimos que el tratamiento del azúcar era la esencia para que nuestros productos puedan ser necesarios e imprescindibles en las cadenas de producción de nuestros clientes”.

 

Me aclara Marcos que uno de los rasgos característicos de la empresa es la diversificación, en este caso apostando por dos fuertes líneas de negocio como la distribución y la fabricación de productos con un valor indispensable para el sector alimentario.

 

Me narra cómo fueron los inicios de Zukán, y de su propia experiencia profesional: tras realizar el servicio militar en Cartagena, le ofrecen unirse a la empresa, y dice que le cuesta tomar la decisión por la distancia. Y es que, en aquel entonces, hace 20 años, una gran distancia parecía separar a la ciudad conservera por excelencia, Molina de Segura, de la capital de la Región. Precisamente ese carácter conservero que está en el ADN de Molina fue lo que llevó al fundador de Zukán, José Moreno, a hacer de la carencia de azúcar en el sureste español un gran negocio: apostó por bajar los camiones que exportaban fruta y conservas al norte de Europa cargados de azúcar y comenzar a situarse como uno de los principales distribuidores de este producto, primero en el sur de España y, poco después en todo el territorio nacional.

 

A continuación, nos explica la importancia de algunas características técnicas de sus productos, los grados Brix del azúcar, y de la estabilidad de las mezclas de azúcar, que son capaces de lograr en Zukán para la industria de las licoreras, de los refrescos, de los helados, y de la pastelería, entre otras. También son grandes productores de azúcar líquido y fondant, que son de las mejores mezclas para aplicar el azúcar en otros productos. Así es Zukán, una empresa que asume el reto de encontrar la mejor solución edulcorante para sus clientes, esa mezcla que les posicione en el top del mercado de la fabricación.

 

Imagine mi cara de sorpresa al descubrir que cualquier licor que tome en una fiesta seguramente se habrá producido gracias a la mezcla de un azúcar tratado en Zukán, pues casi todas las licoreras son clientes de esta compañía. Lo mismo podemos decir de los siropes, que se han vuelto indispensables en la pastelería y repostería actual… y los turrones que consumimos por navidad son, gracias a Zukán, un poco murcianos... aunque se fabriquen en Jijona o en cualquier otra denominación de origen. Y es que grandes líderes mundiales son clientes de esta dulce empresa murciana a la que hoy conocemos más allá de sus datos de facturación. Así que podemos imaginar claramente que sus picos de producción serán verano y navidades, aunque Marcos siempre apuesta por evitarlos como buen directivo, aunque dice no serlo.

 

En mi opinión, trabajar mano a mano con JM ha hecho de él no solo un gran directivo, sino que su preocupación vaya más allá de la financiación, de los avales que la propiedad hubiera tenido que hacer, o de cómo una empresa comienza con siete personas, de las que cita sus nombres de carrerilla, para ahora tener la presión de más de 200 empleados, de los que junto con José aprendió a valorar la humildad, cercanía, familiaridad, con todos, sin importar el puesto que se ocupa.

 

Toca apostar por el I+D+i y es que Zukán es líder y partner en muchos proyectos regionales, nacionales y europeos, en los que aportar valor vuelve a determinar la razón de la empresa. ¿Cuántos proyectos de investigación hay en marcha?

“Nuestro departamento de investigación es vital para el desarrollo de nuestra empresa. Seguimos buscando el producto sustituto del azúcar, pues sin ser España productor de azúcar de caña, y siendo un sector casi sin rango de beneficios por lo general, debemos encontrar ese valor que nos diferencie. Y, siendo ya grandes en el propio mercado a nivel nacional, tenemos cada día un reto nuevo al que poder enfrentarnos para seguir creciendo y sin duda la investigación, el desarrollo y la innovación son el camino”.

 

Hablemos de sostenibilidad…

"Hablemos pues de nuestro proyecto Eureka, desarrollado por nuestra línea de alimentación de las apícolas, enfocado a preservar las abejas, y cuidar de su alimentación. Si hay un 'cliente estrella' y al que más cariño le tenemos en esta empresa, es sin duda la abeja. Todos en Zukán somos conscientes de la importancia de este pequeño animal. Fabricamos productos de alimentación apícola que probamos en nuestro colmenar propio, y alimentamos a unas cuantas más por proximidad. Siempre se ven abejas en los alrededores de la fábrica, que vienen a alimentarse a costa nuestra (risas). Ni que decir tiene que está prohibido matar a ninguna, son parte de la familia".

 

Pero también nos habla de los proyectos en los que el residuo cero es vital, y el reaprovechamiento de todas las materias es imprescindible; de ahí que tengan grandes proyectos en marcha sobre el reaprovechamiento de las sustancias residuales en la pulpa de frutas. Por lo que vemos, sostenibilidad e investigación van de la mano.

 

Todas las piezas del puzle encajan en Zukán. Y parece ser que esto es cosa de niños, porque siendo una empresa tan dulce, el talento más importante se advierte en divertirse en el trabajo diario.

 

Cuenta Marcos que lo más importante son las personas, que sean una gran familia, que sepan adaptarse a los continuos cambios que surgen y que lo vean como una gran diversión; es pues que sus ojos brillan como los de un niño ilusionado. Y si le preguntas por retos, ya personales ya empresariales, tiene varios guardados en el tintero: nadar entre tiburones, navegar, el mar, volver a hacer otra gran fiesta de cumpleaños para Zukán, ahora de los 30 años de empresa quizás.

 

Y, hablando de retos, cuéntanos tu mejor y tu peor momento en la empresa, donde los retos se ponen de pie y las personas deben sacar lo mejor de sí mismas.

El momento más difícil fue la crisis del 2009, la financiación, el apalancamiento de las empresas y las fusiones bancarias. A pesar de que tuviéramos cerradas las ventas para los siguientes años, hacían imposible la continuación de la rueda financiera de cualquier empresa, y también de la nuestra. Pasé muchas noches sin dormir, pensando en el aguante de José Moreno, que ante estas circunstancias ponía al frente todo su patrimonio sin dudarlo, porque sus empresas son su vida. Y es aquí donde debemos crecernos y darlo todo, pues esta empresa fue y es el trabajo de mi vida, donde empecé y donde sin duda quisiera terminar.

 

“Pero también los mejores momentos de mi carrera profesional han sido con Grupo Sefran -el holding fundado por José Moreno en el que también está la energética Soltec-. La salida a Bolsa de Soltec en el año 2020 ha fortalecido a todo el grupo y por fin despejado los momentos difíciles, y siendo yo durante 15 años el responsable financiero de Soltec, es un orgullo poder estar en este proyecto siendo parte del consejo de administración, y sin duda estar cerca de Raúl Morales, un gran líder que apuesta por el talento, es una oportunidad. La salida a Bolsa fue una meta conseguida que emociona muchísimo”.

 

Marcos vuelve a vibrar como un niño recordando grandes momentos, como el 25 aniversario de la empresa, en la que desde el primer empleado hasta el último y todas las personas de la familia Zukán vieron cómo una empresa puede estar unida por los valores de su propietario, el esfuerzo, el trabajo, el desarrollo de las grandes ideas, el riesgo -claro que sí-, la ilusión y la visión de ver en cada problema el reto de solucionarlo. Vuelvo a reiterarme en eso de que estamos ante una empresa llena de niños, dulces, de ilusiones, y de energía vital como éstos, pero que teniendo la edad que tengan, siguen al frente. Una empresa en la que las personas marcan su empuje y en las que las alegrías pasan rápido y se vuelve a la conquista de nuevos retos, ¿quién si no los niños como espejo donde mirarse?

 

Hoy quiero agradecer a Marcos por regalarme un rato de su tiempo para conocerle de cerca, para compartir unas risas en una entrevista que empezó formal y terminó como si fuéramos colegas de toda la vida, y en la que Zukán abre las puertas para que conociera a sus compañeros, a sus amplias y transparentes instalaciones, a su equipo, que sin duda tiene. Y no me cabe duda de que ello es reflejo de la propiedad, y un poco también de la esencia que Marcos quiere dar al trabajo de su vida, hacer de la empresa un lugar con personas con alma; que sin duda yo creo que ha conseguido. Quizá sus circunstancias vitales le han hecho no conformarse con éstas, sino divertirse, esforzarse y saber que siempre le logra salir adelante.

 

Si les ha pasado como a mí, que quieren seguir hablando con él, es sin duda porque es una persona brillante en el ámbito profesional pero también personal, me alegra saber que tiene dos hijas que conocerán que las empresas son para personas, sin importar otras circunstancias.

Marcos Sáez en Zukán, una empresa en la que disfrutar como un niño