La importación mundial de alimentos, en máximos

El comercio mundial de alimentos alcanzará pronto un récord histórico tanto en términos de volumen como de valor agregado, según un informe publicado el jueves por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

 

Para final de 2021, el total global de importación de alimentos debería superar los 1,75 billones de dólares, lo que representa un aumento del 14% con respecto al año anterior y un 12% más que las últimas previsiones. 

 

Según la FAO, el comercio de productos alimenticios ha mostrado una notable resistencia a las perturbaciones provocadas por la reciente pandemia, pero el rápido aumento de los precios plantea importantes desafíos para los países más pobres y los consumidores de todo el mundo.

 

El aumento de precios está impulsado en buena medida por el aumento de tres veces en los costes de los fletes internacionales, la disminución de la producción y encarecimiento de los costes de producción, motivados a su vez por el encarecimiento de fertilizantes, entre otros factores.

 

En concreto, las regiones en desarrollo representan el 40% del total de importaciones y se espera que su coste de importación aumente en un 20% en comparación con el año anterior.

 

En términos de productos, las regiones en desarrollo se enfrentan a fuertes aumentos de precios en productos básicos como cereales, grasas animales, aceites vegetales y semillas.

 

En las regiones desarrolladas, los alimentos de mayor valor como las frutas y verduras, el pescado y las bebidas están impulsando la mayor parte de los aumentos.

 

Las perspectivas de producción mundial de los principales cereales siguen siendo sólidas y se esperan cosechas récord para el maíz y el arroz, a la vez que los cereales para el consumo humano y alimentación animal deberían crecer aún más rápido.

 

Por otro lado, se prevén algunas mejoras en la situación del suministro de semillas oleaginosas y productos derivados, pero sus existencias de final de temporada podrían permanecer por debajo de la media.

 

La producción mundial de azúcar también debería recuperarse, después de tres años de contracción, pero aún estará por debajo del nivel de consumo mundial. En general, se prevé que el comercio disminuya ligeramente debido a la reducción de la oferta en importantes países exportadores y al aumento de los precios.


La producción de carne debería expandirse, impulsada por un rápido repunte en China, especialmente la carne de cerdo. Es probable que se produzca una desaceleración del crecimiento del comercio, provocada por la disminución de las principales regiones importadoras, principalmente Asia y Europa.


Se prevé que la producción de leche crecerá, con aumentos previstos en todas las principales regiones productoras, encabezados por Asia y América del Norte. El comercio mundial también debería aumentar.


Por último, se espera que la producción de pesca y la acuicultura aumente un 2% para final de año. A pesar de los altos costos de flete y los retrasos logísticos, el comercio de pescado también se está recuperando.