El ICM depende del contexto de la partida, al igual que ocurre con otros factores. A través de él se establece una relación entre el tamaño de las fichas de póker y el dinero disponible en, por ejemplo, un torneo.
Para calcular el ICM es preciso utilizar un programa especialmente diseñado para esta finalidad, dado lo complejos que resultan los cálculos. Obtener el resultado por pura técnica es difícil, y más si se está disputando al mismo tiempo una partida de póker.
Comprendiendo el significado del concepto de ICM
El ICM permite tomar decisiones mucho más acertadas en los torneos de póker, que son las competiciones de más riesgo al poder ser eliminados, al contrario que en las mesas de cash, que pueden ser abandonadas por el jugador en cualquier momento.
En los torneos de póker es habitual jugar de manera más agresiva debido precisamente a la posibilidad de quedar fuera de la competición. Todo ello, unido a la ambición, puede dar lugar a partidas frenéticas donde es importante no solo tener en cuenta el equity: también el ICM, siendo este más importante para el jugador desde el punto de vista del dinero.
“El ICM lo que hace es permitirnos valorar la relación entre las fichas que tenemos en el torneo o el Sit & Go, y el equity, es decir, el valor en dinero de esas fichas”, explican los expertos en póker. “Si conocemos el ICM, entonces podremos llevar a cabo mejores movimientos durante la partida, proponiendo pactos de premios en los torneos cuando nos interese. Es decir, jugar de manera más inteligente y acertada”, añaden. Unos pactos que, por otro lado, permiten reducir la varianza
Hay que tener en cuenta que en los torneos las manos no son independientes y que, por tanto, el jugador siempre tiene la responsabilidad de valorar el efecto de las fichas que tenga a su disposición cuando tome decisiones.
¿Cómo es posible calcular el ICM en póker?
A pesar de su complejidad, el ICM puede ser calculado. No obstante, lo mejor es hacer uso de un software especializado para que automatice muchos de los cálculos, facilitando las cosas al jugador.
El ICM puede ser calculado con varios tipos de calculadoras digitales diseñadas expresamente para tal fin. En ellas, basa con introducir algunos datos, como el stack o los premios recibidos en cada posición, para que el algoritmo trabaje y dé a conocer el valor en metálico que tiene en cada momento el stack de los jugadores, pudiendo ajustar la estrategia del torneo conforme avanza.
Los expertos recomiendan familiarizarse con el control de estos recursos para poder dominarlos a la perfección en los momentos críticos de los torneos. “Aunque la premisa de estos programas es la misma, en realidad la rapidez con la que se introducen los datos adecuados es fundamental para poder tener el suficiente margen de maniobra, permitiendo estudiar los próximos pasos a conciencia y haciendo que los resultados sean mejores”, comentan los profesionales de póker de EasyPokerApps, una de las páginas web de referencia en la que se dan a conocer a los usuarios las mejores aplicaciones de póker del sector.
“No cabe duda de que calcular el ICM marca la diferencia en el devenir de la partida en un torneo de póker, pero para obtener un resultado óptimo es esencial que el jugador conozca la herramienta que está manejando”, sostiene el equipo de la web.
Para comprobar hasta qué punto calcular el ICM o no hacerlo puede determinar el resultado final del torneo, desde EasyPokerApps insisten en comparar la reacción de un jugador que lo calcula a uno que no lo hace.
“Por norma general, si un jugador no calcula el ICM, puede pensar que un jugador pueda tener un botín de menor valor solo porque su stack es más pequeño”, comentan. “Sin embargo, es posible que su valor sea más alto, aunque su stack sea más pequeño, y esto puede saberse calculando el ICM, lo que hará que la estrategia sea diametralmente opuesta entre el jugador que conoce este dato del que lo ignora”, explican.
Por tanto, es importante, en primer lugar, estudiar qué herramienta puede satisfacer las necesidades del jugador para habituarse cuanto antes a su funcionamiento, y segundo, introducir los datos necesarios con agilidad para disponer de un importante margen de maniobra para estudiar nuevas estrategias y aplicarlas en función del valor que tenga el stack de los rivales.
A día de hoy, la popularidad de los programas informáticos que ayudan a calcular el ICM, y su eficiencia demostrada, es tan alta que su uso es casi obligatorio para quienes quieran optar a la victoria.
Disputar un torneo de póker contra jugadores que conozcan el ICM colocará al jugador que no lo haga en una posición de clara desventaja, por lo que es indispensable familiarizarse con estas herramientas y con el manejo de estos conceptos de póker avanzado para intentar mejorar la toma de decisiones durante la partida.
