Para 2023, la OMC anticipa un ligero aumento del 0,8% en el volumen del comercio mundial de mercancías, por lo que no sería sorprendente ver que el volumen comercial de la industria de plásticos de los EE.UU. en 2023 vuelva a superar el crecimiento en el volumen total de mercancías a nivel mundial.
No obstante, la desaceleración del crecimiento económico en China puede plantear un desafío para la industria de plásticos de los EE.UU. dado que el gigante asiático ocupa el tercer lugar como mercado de exportación más grande para los plásticos estadounidenses. Aunque el país mantiene un déficit comercial general con China, en lo que a plástico se refiere disfrutan de un superávit comercial de 3.100 millones de dólares, siendo así el segundo país con mayor superávit comercial, principalmente en resines, solo superado por México.
EE.UU. sigue siendo uno de los países que más contribuye al comercio mundial de plásticos, con unas exportaciones que aumentaron un 11,8% en 2022 e importaciones en un 7,2%, habiendo reducido su déficit de 10.000 millones de dólares en 2021 a 7.400 en 2022.
Este sector se considera un indicador de la fortaleza de la demanda del mercado interno de EE.UU. y todavía denota fortaleza, habiéndose pasado de un consumo en bienes de la industria plástica del 13,7% entre 2021 y 2022, con un total de 345.900 millones de dólares.
El año pasado, el volumen del comercio mundial de plásticos alcanzó los 1.700 millones de dólares, con China, EE.UU. y Alemania como los tres principales actores en el comercio mundial de plásticos.
En la actualidad, Europa lidera la iniciativa de reducir el uso de plásticos y tiene la intención de penalizar su comercialización mediante la aprobación de nuevas leyes. A pesar de estos esfuerzos, los plásticos aún desempeñan funciones difíciles de reemplazar, como garantizar la seguridad en ciertos productos higiénicos e industriales. Por lo tanto, se espera que su uso perdure durante varias décadas.