José María Martínez es, junto con sus hermanos Jaime y David, uno de los grandes empresarios de la Región de Murcia, y uno de esos referentes empresariales a los que siempre hay que escuchar. Visionario dentro del mundo de los negocios, como confesó hace un par de años a un grupo de estudiantes, comenzó su andadura empresarial en una mesa oxidada en una oficina de 30 metros. Hoy dirige Grupo Caliche, uno de los holdings empresariales más importantes de la Región, con su negocio diversificado en varias áreas -todas ellas más que pujantes-. Murciadiario le encuentra en el Memorial José Martínez (uno de los precursores de la implantación del deporte del pádel en la Región de Murcia), que su empresa ha impulsado hasta convertirlo en un referente nacional. Martínez recuerda al que fue su amigo como una “muy muy buena persona a la que la vida se le fue demasiado pronto”. Por ello, se confiesa feliz de celebrar su legado a través del deporte en un evento multitudinario que se celebra en el Pilar de la Horadada. Feliz, con la misma pasión por seguir haciendo crecer su empresa, y siempre pensando en la RSC, porque “triunfar en los negocios es repartir con la sociedad lo que has ganado”.
Este fin de semana se celebra una nueva edición del memorial José Martínez de pádel, que se ha convertido, gracias a Grupo Caliche, en una cita ineludible para los amantes de este deporte en toda España. ¿Cómo afronta este evento?
Quiero agradecer que Murciadiario esté apoyando el décimo aniversario del memorial. Estamos sorprendidos y muy agradecidos por la enorme respuesta que estamos teniendo, con ese cariño hacia Martínez, que trajo este deporte tan bonito a nuestro municipio y posiblemente a la Región de Murcia. Hace unos minutos hablaba con Juani Mieres, un gran campeón del mundo, y me recordaba que fue él la primera persona que le invitó a venir a Murcia. Este homenaje está más que merecido y la respuesta que estamos obteniendo nos hace muy felices.
¿Por qué decide apoyar este evento?
En Grupo Caliche hemos estado siempre muy unidos al deporte, tanto el mayoritario como el minoritario, y apoyamos mucho a las bases. Estamos totalmente convencidos de que los valores del deporte son idénticos que defendemos en nuestra empresa: competitividad y lucha, pero también la amistad y el trabajo en equipo, que te hacen ser mejor persona. Ser bueno en los deportes y en los negocios tiene que ver con superarte personalmente. El deporte y los negocios comparten esos valores que Grupo Caliche va a seguir defendiendo siempre.
La RSC está muy arraigada en su empresa, no solo a través del deporte. No hace mucho pusieron en marcha el camión solidario.
¡Esa es una iniciativa preciosa! El transporte es algo que lleva siglos entre nosotros, pero no había un transporte solidario que pudiera ayudar a todos los necesitados. Nosotros, cuando hay una necesidad o un desastre, aportamos nuestro camión solidario para transportar lo que se necesite donde se necesite.
En los últimos tiempos, otras grandes empresas de la Región también se han sumado a estas iniciativas y han apostado por la RSC. ¿Cree que hoy en día es importante que las grandes empresas decidan apostar por ello?
Es algo muy necesario, fundamental, que te devuelve a los principios. Los tres hermanos que fundamos Grupo Caliche venimos de trabajar en la carnicería de nuestra abuela y recibimos ayuda para iniciar lo que hoy es nuestra empresa. Por eso pensamos que una empresa que no tenga ahora Responsabilidad Social Corporativa (hace 30 años ni tenía nombre, pero ya lo hacíamos), no tiene connotación social, no es una empresa como tal. Porque al final la empresa da oportunidades, oportunidades de trabajo, familias que viven de ella, hay mucha responsabilidad; pero hay parte muy importante que tiene que revertir en la sociedad, y aunque parezca una frase hecha no lo es: es importante que la empresa reparta lo que gana con la sociedad que se lo da.
Si todas las empresas lo tuvieran tan interiorizado como ustedes, esta sociedad sería otra y seguramente mejor.
Ya hay muchas empresas que lo hacen. Las empresas son personas, y las personas por naturaleza somos buenas. No conozco ningún gran empresario cuya motivación sea ganar dinero. A los grandes empresarios no es el dinero lo que les hace levantar de la cama cada mañana. ¿Cree que Amancio Ortega se levanta cada mañana por dinero? Se mueve por la pasión, por mantener y hacer crecer lo que ha creado. Eso es lo que mueve montañas. Es parecido al amor, a las burbujas de enamorarse. La empresa es amor. Eso es lo que siente el empresario cuando saca un proyecto adelante, cuando paga las nóminas a sus trabajadores, o cuando abraza el éxito.
Tras los 50 años que cumple este año Grupo Caliche, ¿sigue habiendo esa pasión?
Sigue habiendo muchísima pasión. Es realmente lo que nos mueve.
¿Cómo lo van a celebrar?
Ya hemos hecho muchísimas cosas, como, por ejemplo, conseguimos que el ayuntamiento de San Javier le pusiera su nombre a la calle de nuestra nueva sede a nuestro padre, fundador de la empresa. También Hemos creado el camión solidario, el ‘Family Day’, hemos apoyado el deporte, la cultura en eventos como el 50 aniversario del teatro de San Javier y también hemos hecho cosas en la ciudad de Murcia y otras ciudades, porque estamos convencidos de que 50 años no se cumplen todos los días y estamos cogiendo fuerza para cumplir 50 más.
En este convulso 2019, ¿esperan repetir resultados, incrementarlos?
Acabamos de cerrar el primer semestre con un crecimiento importante y tenemos proyectos muy importantes encima de la mesa. Estamos muy fuertes en el tema de intramar, pues la agricultura murciana está muy potente y nosotros con nuestra apuesta por el sector marítimo estamos ayudando a los empresarios a abrir nuevos mercados. No solo llevando sus productos, sino asesorándoles para entrar en países de África y América, donde se están abriendo oportunidades de negocio muy importantes.
Luego también estamos en el sector de las telecomunicaciones, donde hemos abierto en nuevos países y creciendo. En esta área, que está en constante evolución, nuestro nuevo reto es la llegada del 5G.
Tampoco me puedo olvidar de nuestra ‘joya de la corona’, el New Castelar College, que nos está dando muchas satisfacciones. No por lo económico, porque realmente un colegio solo puedes hacerlo sostenible, pero nunca imaginábamos que la apuesta por la docencia nos iba a convertir en mejores empresarios. Ahora abrimos un FP dual que nos tiene muy ilusionados.
¿Cómo afrontan la faceta docente y en qué áreas apuestan por la FP Dual?
Vamos a compaginar el mundo de la docencia con el trabajo. Hemos adoptado un modelo canadiense y alemán, y hemos apostado por grados como la administración de empresas, la logística, y algo muy disruptivo como el apoyo a dirección -un puesto muy demandado en las grandes ciudades-. Es ser el segundo de un CEO, que es alguien muy difícil de encontrar. Yo animo a que los jóvenes conozcan estos grados porque son muy diferentes, están enfocados muy a la empresa, y para no ser solo un mileurista, son trabajos que pueden lograr sueldos más que dignos.
