La Confederación Nacional de la Construcción (CNC) ha alertado este jueves de que en España han quedado desiertas casi 500 licitaciones públicas, dos de ellas en la Región de Murcia, por culpa de unos precios de obra desfasados y eso provoca un "agujero" que supera ya los 230 millones de euros, 3 en la Región.
Desde la Federación Regional de Empresarios de la Construcción de Murcia (Frecom), "nos sumamos a la reclamación de CNC de obligar a incluir una cláusula de revisión de precios tanto en los contratos en curso como para los futuros".
Según los datos expuestosse han identificado casi 500 obras desiertas en las 17 comunidades autónomas, aunque ha sido Cataluña la más afectada, donde el "agujero" por las 200 licitaciones desiertas escala por encima de los 50 millones de euros. Por número de licitaciones paralizadas, le seguirían Galicia (96), Andalucía (46), Comunidad Valenciana (32) y País Vasco (24). En Canarias, en cambio, no ha quedado ninguna obra desierta.
Según el estudio, la obra licitada de mayor cuantía que ha quedado desierta asciende a 37 millones de euros y la cuantía media por obra pública desierta es de 475.000 euros.
En total se han contabilizado 484 obras cuya ejecución se ha quedado sin empresas que la asuman y de ellas, 35 licitaciones, lo que supone el 7%, tienen un presupuesto superior al millón de euros.
La patronal del sector atribuye este "agujero" a unos precios desfasados, "muy por debajo de la realidad del mercado", que no recogen además el alza del coste de las materias primas, lo que está provocando una importante paralización de la obra pública.
La CNC advierte además de que, de no tener en cuenta en los proyectos que se liciten este encarecimiento y en los pliegos algún mecanismo de revisión de precios, se puede poner en peligro la recuperación económica del país. La patronal destaca tanto la envergadura de las obras que quedan en el aire como los miles de puestos de trabajo no creados debido al vacío empresarial.
De esta manera, entre los centenares de proyectos que han quedado desiertos aparecen obras cuya parálisis impacta en la vida de millones de personas: centros educativos, carreteras, viaductos, líneas de alta velocidad o museos, añade.
